ADOLF HITLER Y EL OCULTISMO NAZI
En mayo de 1913, Hitler abandonó Austria para instalarse en su querida Alemania, donde se alistó en el ejército tan pronto como estalló la primera Guerra mundial. Tras su paso por el frente, Hitler solía contar una milagrosa historia para demostrar que la providencia lo protegía. En esta contaba, que un día estando en las trincheras con otros camaradas, escuchó derepente una voz que le dijo: "levántate y ve hacia allá". El mensaje era tan claro e insistente que el soldado, obedeció de inmediato y, cuando apenas había recorrido veinte metros a lo largo de la trinchera, un obús cayó sobre la zona donde él había estado, matando a todos sus compañeros. Todavía como soldado, hitler, vigiló varias de las reuniones de un pequeño grupo radical que pronto se convirtió en el Partido Nacionalsocialista Alemán de los trabajadores, un largo nombre frecuentemente abreviado como partido nazi. En apenas tres años, Hitler ascendió en su organigrama hasta convertirse en el líder.
Tras el periodo en el que el Fhurer, es encarcelado, crearía una nueva unidad paramilitar, la Schutzsaffel, más conocida por la SS. Sus miembros, se distinguían por su uniforme negro, su juramento de lealtad personal a Hitler y por sus misteriosas prácticas de iniciación y tortura. El jefe de este grupo, cuidadosamento escogido por Hitler, fue Heinrich Himmler, un personaje iniciado en las ciencias ocultas que llegó a ser considerado como el segundo hombre más poderoso dentro del Reich. Fieles a sus convicciones, Himmler buscaba sus oficiales entre quienes pudiesen demostrar una ascendencia aria sin contaminar de , al menos, 175 años de antigüedad. También entre sus creencias estaba el convencimiento de que los niños concebidos en cementerios nórdicos heredaban el espíritu de los héroes allí enterrados y, con la finalidad, llegó a publicar una lista de cementerios apropiados para la procreación.
![](https://upload.wikimedia.org/wikipedia/commons/thumb/7/79/Bundesarchiv_Bild_183-S72707,_Heinrich_Himmler.jpg/250px-Bundesarchiv_Bild_183-S72707,_Heinrich_Himmler.jpg)
Otro ejemplo, del ocultismo nazi, fué la relación del Fuhrer con la astrología y con la predicción. En general, se gha debatido mucho debido a que no existe ninguna prueba de que Adolf Hitler consultara jamás a ningún astrólogo, aunque muchos se hayan jactado de haber sido los gurús de este. De hecho, alejaba de su entorno a cualquier tipo de profeta: con él ya era suficiente y, además, tenía pánico a los malos presagios. A pesar de ello, un oscuro astrólogo llamado Karl Krafft llegó a ser un personaje clave en uno de los más enigmáticos episodios de la guerra. Krafft predijo el 2 de noviembre de 1939, que la vida de Hitler peligraría por culpa de una explosión. Seis días después, un potente artefacto dstruyó la tribuna que Hitler había abandonado minutos antes. Esta predicción valió a Krafft, la confianza de un miembnro de la jerarquía nazi ya atrapado en las redes del misticismo: Rudolf Hess, entonces segundo hombre en importancia dentro del gobierno nazi. Hess, mediante una alineación de seis planetas con la luna, auguraba que sería favorable para los planes de los nazis, sin embargo fracasaría y Hitler renegó de él afirmando que se había vuelto loco por culpa de los astrólgos y adivinos.
Algunos expertos, no dudan en afirmar que el ocultismo residía en la médula de los crímenes que diferenciaron al nazimo de otras dictaduras: la guerra contra los judíos inspirada en una visión ocultista de la humanidad, dividida entre superhombres y criaturas infragumanas. La matanza sistemática de judiós fue el objetivo principal de su régimen; un fin que Hitler plasmó en su testamento político, dictado horas antes de su muerte y en el cual todavía llamaba a la lucha contra el judaísmo.
Años más tarde, al intentar explicar por qué habían seguido el camino del crimen y barbarie diseñado por Hitler, algunos ciudadanos alemanes, alegaron que los poderes ocultos de Hitler lograron poner sobre su voluntad.
Sin duda, Hitler, creía en que algo o alguien, le ayudaba en todos los planes que quería llevar acabo y que le llevo hasta dondé llegó gracias a sus creencias férrimas en esa fuerza. Sin embargo, de poco le serviría hasta que la alianza entre paises contrarios a su ideología lo derrotaron. ¿Quizá el mal intentó dominar, y cayó derrotado sobre otra fuerz llamada "BIEN"?. MAU